La tarima sintética o tecnológica no nos ha gustado nada. La hemos instalado a petición de un cliente. Vamos a analizar paso por paso sus inconvenientes de la instalación de tarima sintética.

Como el Ipé del Brasil o la tarima de Elondo no hay nada como tarima de exterior, sin duda la madera es superior a cualquier tarima sintética en todos los aspectos. Y aunque la publicidad sobre la tarima sintética nos cuente historias: como que añaden restos de madera, en realidad, esto dista mucho de la verdad. Y lo cierto es que al cortar este material, se produce una nube tóxica nada sana para el instalador de tarima, ni para cualquiera que la respire: Unos olores tóxicos que en nada se parecen a la tarima de madera maciza.

Pero lo primero que le va a interesar a nuestros clientes es que la tarima sintética no se puede restaurar, lo que supone cambiar un suelo por completo cuando se ha desgastado; mientras que con la madera a los 15 años, si es preciso, le das un lijado y como nueva.

Así que ¿usted qué prefiere como tarima exterior?

En Primer lugar la tarima sintética se calienta mucho más que la madera

No nos ha gustado nada el tacto del plástico, expuesto al sol esta tarima exterior es un material que no sólo no se puede pisar porque quema extremadamente, más si el color es oscuro como en este caso, sino que el olor es desagradable. La instalación de tarima se complica por las elevadas temperaturas de este material.

1. En cuanto a la instalación esta tarima sintética ofrecía varios problemas para el instalador, el más grave es que al cortar las piezas se produce una nube tóxica que exige mascarillas, respirar virutas de plástico como que no va a ser bueno.
2. Algunas tarimas sintéticas huelen mal cuando se calientan.
3. Al instalar la tarima sintética se necesitan máquinas más potentes, no porque sea más dura sino por que calienta los discos de sierra y se estropean.
   
4. Otra decepción ha sido que este material no viene retestado (puede que otros fabricantes de tarima sintética sin ofrezcan esta prestación) lo cual no facilita la instalación de tarima, es decir las piezas encajan lateralmente pero no encaja de cabeza (por eso de testa, restestar), lo cual implica que las uniones frontales deben apoyarse obligatoriamente en el rastrel.
   
5. No se puede dar un lijado para igualar las piezas después de instalar la tarima, ya que viene con una textura que se pierde, lo cual implica que los acabados no quedan tan bien.
   
6. Concretamente en este material (del que no citaremos la marca) lo que más nos ha sorprendido son sus dilataciones, que hacen que las tablas se contraigan entre si cuando hace calor creando separaciones en las testas.
7. Al instalar la tarima sintética las colas y los pegamentos funcionan peor que en la madera.
   

 

Por otro lado el material necesita la aplicación de un líquido anti rayos UVA, es decir, que sí necesita mantenimiento, entonces, a tenor de lo dicho ¿dónde está la ventaja de la tarima sintética?

Nosotros no vemos más ventajas que la madera, uno de los grandes inconvenientes de este producto sintético es que no se puede restaurar. Mientras que la madera se puede lijar, y renovar cada muchos años, la tarima sintética no tiene esta posibilidad, ante el desgaste por el uso no hay forma de recuperar la textura del material.

La instalación de tarima sintética es complicada, sobretodo es complicado los remates y acabados. Mientras que la madera se puede lijar e igualar en la tarima sintética no.

La tarima sintética no resiste las contracciones de temperatura, sus contracciones son mayores que la madera, por lo menos el producto que hemos probado. Es posible que a lo largo del tiempo las tablas al contraerse tanto acaben tirando de la cola y de las grapas produciendo un desastre total.

Mil veces antes preferimos la tarima maciza de Ipé, que al contrario que el pino, no produce fendas (grietas en la madera) o cementaciones. Definitivamente no aconsejamos la tarima sintética. Si aún tiene más interés en este material le recomendamos leer nuestra comparativa entre tarima sintética y tarima de madera maciza

 

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